Caína, vista por Antonio Mingote
El Semanal, 15.05.05
Saliendo al amistoso encuentro de Eduardo Allende (o su doble, AM), el correo me trae un ejemplar de El Semanal [15.05.05] con una imagen de Antonio Mingote que, a mi modo de ver, es un espejo casi ideal de la Caína profunda.
Ahí está un Cicuta de la imaginería popular, un ahorcado que viene de Goya y un árbol que viene de Campos de Castilla:
El hombre de estos campos que incendia los pinares
y su despojo aguarda como botín de guerra.
posted by Juan Pedro Quiñonero at 5/14/2005 12:29:00 PM
7 Comments:
Doble, lo que se dice doble no soy. Pero me consta que usted sí tiene un doble, de su mismo nombre, que le plagia todo lo que escribe y que mantiene un blog en Typepad.
... está usted en todo...
en realidad, www.unatemporadaenelinfierno.typepad.com... es un Blog experimental...
el mismo está clonado en el typepad de Le Monde... la triplicación tiene por objeto intentar evaluar con que modelo terminaré quedándome... si es que me quedo en este infierno...
..
el invento de spamearse uno mismo sobre el mismo blog del mismo autor supongo que es una cosa absurda, completamente absurda, really.
La intimidad (que algunos analfabetos se empeñan en llamar 'privacidad') y la discreción no son fáciles de hallar en este 'infierno'.
En todo caso la posibilidad de que decida no quedarse en este infierno (haciendo verdad su título) me entristece en gran manera. Confío en que no sea así.
Su amistoso saludo cordial estimula al "yo" partidario de seguir en la trinchera.
Avanti!!!
Del infierno no hay escapatoria, amigo. Esto ya es para toda la eternidad.
Hola a todos:
Espero junto con Eduardo y Carlos que decidas quedarte aqui, aunque cambies de circulo y de sistema, aunque siempre estaran los fieles lectores para seguir acudiendo a él.
Saludos a todos.
... que quereis que os diga... la evidencia es que ----muy al margen de mi modesto infierno---- la miriada de nuevos medios de comunicación crea nuevas formas de amistad, comunicación, solidaridad, que tienen algo de maravilloso, dando a esa palabra el sentido que tiene en los cuentos de hadas: realidad invisible que abre nuevas puertas a mundos desconocidos...
... argumento más que potable para los viejos lectores de La Isla del Tesoro, entre los que me encuentro, claro.
Gracias, amigos corsarios.
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